Si alguien quiere enamorarse... no se detenga

agosto 28, 2010

antes, durante y después: nada

"y el teléfono no suena más, ya no soy tan especial"

claro que se me impregnó de inmediato apenas la escuché. y aunque no lo quiera aceptar, muchas veces me siento así; ya no tan especial, a veces llegando sin el tan. y siendo una más, una más de ese montón de esas ellas que van por la vida caminando y cantando canciones y esperando cambios y colectivos. y si me veo deambulando por las calles cuando camino para lugares donde tengo que ir, cosas que tengo que hacer, sobre todo cuando todo se vuelve tan confuso y yo no soy yo y no me siento yo, y veo la gente y no me veo a mi, me esquivo la mirada y veo un flequillo y las ondas que se bambalean de a poco por el viento que las mueve, porque todavía no es primavera pero el sol está lindo igual. cuando deambulo y no me siento yo, me pierdo y me confundo los caminos y viajo en otros colectivos, bajo donde no sé dónde estoy, pienso lo que no sé que es, y me sigo pèrdiendo, y no tengo hora no tengo lugar no tengo sueño, nada más camino y respiro, se me confunden las palabras y no entiendo, no entiendo, y sigo sin entender. pienso en llegar, a dónde no sé porque también es confuso, pero en llegar.

es como me preguntaba anoche, necesito pintar, pero por qué me paro frente al atril, me pongo una hoja en blanco, y no sale nada, no hay nada, no quiere salir, no quiere salir, no quiero salir? es una especie de trabalenguas mental, un laberinto de letras y colores, un espiral de palabras en idiomas que desconozco, no entiendo, no entiendo, y sigo sin entender; es como si nada tuviera o tuviese sentido. no hay motivo, a veces pienso que no hay sueño, expectativa, meta, que no hay nada después de lo que es hoy.

y ves, ves cómo me voy y deambulo sin mirarme entre las letras del laberinto de palabras cromáticas de mi cabeza en espiral?

y no llego a ningún lado; ves, ya no soy especial.

agosto 26, 2010

ña

disyuntivas, la vida está llena de disyuntivas. pero llenas. hay veces que sentís que no te dan nada, que no recibís nada del mundo, pero si el mundo te termina dando algo, sentís que no lo merecés.
a veces me paasa que cuanto más frágil me siento, más dura, terca y agresiva me pongo. y por qué cosas que se suponen dan placer, a mí muchas veces me causan dolor, preocupación, y me termino alejando. me alejo, me voy; me voy de lo que me hace bien. me alejo del sol, a veces me alejo del sol, para no terminar viendo mi cuerpo ahí. claro, ahí está todo. debería hacer una regla de tres simple con este tipo de cosas que me dan vueltas en la cabeza. igual, ahora que lo pienso, no llego, porque mis disyuntivas son de a dos, falta un punto, una etapa, un síntoma, un síndrome? abstinencia... (cómo?)



punto
yo sé que necesito pintar, y mucho. pero no me paro enfrente del atril, y se me vuela la caebza como antes; no sé que está pasando. tengo todo. y al mismo tiempo me falta todo. y termino teniendo nada. qué bien. qué mal.
qué
mal.

agosto 11, 2010

acá, y mejor sonreír

holamod, bueno. bueno qué? no se, que te amo. que por qué histeria y rayes? porque la náusea, porque provocado, porque irritable. pero te amo, y entonces ansiedad, entonces nerviosidad. y pero por qué tanto de todo eso tan insano? no sé, te juro qué; y te juro también que te amo.

ahora, después de unos días; por qué tanta preocupación, tan pre? no sé, por costumbre. para no aburrirme ni cansarme de la rutina de los días a las nueve - ó y media, dependiendo el humor - y hacer cosas que te cuento y otras que no, que las cuento después en uno de esos estalles amorosos y románticos desenfrenados, que desembocan en cosas como tarjetascartasregalosdibujoscolores, que nos hacen reír, emocionar y nos hacen. después, después nos comemos un almuerzo tipo familiar, en horario familiar, con personas sumamente familiares y gatunas y humanoides. que no le des en la mesa que la vas a acostumbrar, y así seguimos con la ducha, y nos vamos al sitio de la tortura, en el cual nos gusta tan poco que nos digan lo que hacer, ó cómo actuar; pero, al fin y al cabo lo terminamos obedeciendo, porque sino no tenemos plata, y si no tenemos plata no hay qué fumar, qué tomar, ni con qué jugar.

pienso volver y tomar un colectivo que tarde diez minutos más que lo acostumbrado, solamente para llegar y verte la carita de angelito principito de blondos rulos (ya es cuasi trillada la expresión, pero qué más da, si es de mi a vos, o no?) y llenarle las mejillas de besos y gastarme los labios en hacerlo sin cansancio. entonces, amor, hola amor. hola, te extrañé hoy, y me pasó esto, esto y esto también. pero te extrañé mucho y te pensé tanto; qué bueno que estoy acá. qué bueno que hoy me desperté acá y no encuentro la llave.